Tras la superación de la crisis diplomática con Venezuela crece la expectativa por el incremento del cupo de gasolina que recibe Riohacha, de la cooperativa indígena Ayatawacoop, autorizada para la importación del combustible venezolano.
Actualmente, la capital de La Guajira recibe 556.228 galones de combustible entre gasolina y Acpm. Este cupo, con el cual se proveen las estaciones de servicio, tiende a ser insuficiente para la provisión del parque automotor de la ciudad, ya que para los comercializadores suele ser más rentable la venta de Acpm a las empresas bananeras y contratistas del sector que la venta de gasolina al detal. Por ello desde Ecopetrol se planteó la posibilidad real de aumentar este cupo a cerca de 1.000 galones mensuales, según el anuncio hecho por las directivas de la cooperativa y el Gobierno Municipal, para frenar los problemas de abastecimiento, que regularmente se presentan al finalizar el mes con la carencia del combustible venezolano.
En este sentido, el secretario de Gobierno Municipal, Marcos Siosi Pino, anunció que se revisará con lupa entre otras a las empresas bananeras que consuman más de 20.000 galones de Acpm al mes, para buscar que lo adquieran directamente en la Cooperativa y no en las estaciones de servicio. Con esta medida, se persigue que los transportadores y pasajeros de Riohacha no sufran cada fin de mes con el desabastecimiento y el consiguiente incremento en las tarifas de taxis y colectivos, así como algunos productos de la canasta familiar.
La crisis diplomática entre Colombia y Venezuela estimuló la unión de las tres cooperativas indígenas que operan en el Departamento. De este modo se espera que próximamente estas tres cooperativas, Ayatawacoop, la más grande de todas, gerenciada por Rosario Henríquez Hernández, la Cooperativa Montelara, a cargo de Adán Medina, y la cooperativa de Uribia, en manos de Rosa López, funcionen como una sola, a fin de organizar el suministro de gasolina importada no solo en Riohacha y la Alta Guajira sino en todos los municipios del Departamento.
Esta unión fue bien recibida por parte de los gobiernos nacional y departamental, así como por las directivas de Ecopetrol, que según Rosario Henríquez, de Ayatawacoop, veían en la desintegración de las cooperativas una debilidad para aprovechar las ventajas que establece el programa especial de subsidio a la gasolina para las comunidades indígenas.
Por otra parte, la Administración Municipal de Riohacha anunció que al tiempo que se organizan las cooperativas y se incrementen los cupos de suministro de gasolina a la ciudad, se establecerán controles en pesos y medidas para frenar fenómenos como la especulación que incide considerablemente en la canasta familiar de los riohacheros cada fin de mes.
"El Heraldo"
No hay comentarios:
Publicar un comentario