Una vez más nuestro Apreciado Amigo Elkin De Armas Pérez nos pone a pensar al tocar unos de los temas más neurálgico de la ciudad.
Por: ELKIN DE ARMAS PEREZ
Ingeniero Industrial
Cierto día del año 1998 fui designado para dirigir un encuentro de fútbol en la categoría Primera B en el Municipio de Cereté (Córdoba). Luego de ubicarme en el hotel esperé un taxi, el cual nunca apareció porque el servicio de transporte imperante era el mototaxismo. Pensé en ese momento que en Maicao jamás se vería el servicio de transporte de pasajeros en motos, por diferentes causas, entre ellas la facilidad para adquirir un vehiculo venezolano y el precio accesible del combustible.
Hoy, diez años después, reconozco que no tenía razón y el mototaxismo es una realidad con la que tenemos que convivir los residentes en el Municipio de Maicao y en la mayoría de entes territoriales del país. Es un tema que los dirigentes políticos y gobernantes de turno temen tocar debido a la polarización que se presenta entre quienes lo atacan y quienes lo defienden.
Lo cierto es que ambas posiciones tienen razones valederas y respetables por demás. El mototaxismo es atacado por aquellos que sienten lastimados sus derechos, bien porque los ha desplazado en su oficio como conductor o porque ha sido victima de algún accidente o atropello de los mototaxistas. Es defendido por quienes lo consideran como una alternativa viable ante el deficiente servicio de transporte urbano con vehículos en mal estado, lugares del municipio donde no se prestaba el servicio y tiempos de espera demasiado largos, entre otros. Pero el argumento principal para quienes lo defienden es que muchas familias del municipio resolvieron el problema del desempleo y ante el crecimiento del mototaxismo se ha abierto espacio a otros negocios como proveedores de motocicletas que ofrecen precios bajos y diversas modalidades de pago para adquirirla, talleres de mantenimiento, ventas de cascos, chalecos etc.
Por lo anterior, reitero, el mototaxismo es una realidad en el Municipio de Maicao y a sabiendas que es una actividad no reglamentada por el Gobierno Nacional, los mandatarios territoriales deben entender que aun cuando la Ley se hace para respetarla, una situación es lo que se vive en las frías oficinas de la capital de la Republica y otra bien distinta la que tienen que enfrentar quienes conviven diariamente con la problemática.
El Gobierno Municipal no debe ser indiferente ante el tema del mototaxismo y particularmente considero que debe tomar medidas conducentes a la sana convivencia ciudadana, comenzando con el control al ingreso de mas motos al municipio mediante la realización de un censo de la cantidad de motos existentes a la fecha, con la identidad de sus propietarios y características de la misma; establecer un convenio entre el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), el gremio de mototaxistas y la Administración Municipal para la expedición de certificados judiciales de la persona que conduce la moto y apoyarse en entidades como el SENA, Policía Nacional y Transito Municipal para la realización de jornadas de capacitación al gremio de mototaxistas, aprovechando los días en que no laboran, tal como el día sin moto y el pico y placa.
Lo anterior con el propósito de promover un comportamiento ordenado y respetuoso que se refleje en la calidad de vida ciudadana y de los mismos mototaxistas, porque se harían acreedores a un cierto grado de tolerancia por parte de sus conciudadanos. Y lo más importante, la vida es el don mas preciado que Dios nos dio y debemos conservarla.
Ingeniero Industrial
Cierto día del año 1998 fui designado para dirigir un encuentro de fútbol en la categoría Primera B en el Municipio de Cereté (Córdoba). Luego de ubicarme en el hotel esperé un taxi, el cual nunca apareció porque el servicio de transporte imperante era el mototaxismo. Pensé en ese momento que en Maicao jamás se vería el servicio de transporte de pasajeros en motos, por diferentes causas, entre ellas la facilidad para adquirir un vehiculo venezolano y el precio accesible del combustible.
Hoy, diez años después, reconozco que no tenía razón y el mototaxismo es una realidad con la que tenemos que convivir los residentes en el Municipio de Maicao y en la mayoría de entes territoriales del país. Es un tema que los dirigentes políticos y gobernantes de turno temen tocar debido a la polarización que se presenta entre quienes lo atacan y quienes lo defienden.
Lo cierto es que ambas posiciones tienen razones valederas y respetables por demás. El mototaxismo es atacado por aquellos que sienten lastimados sus derechos, bien porque los ha desplazado en su oficio como conductor o porque ha sido victima de algún accidente o atropello de los mototaxistas. Es defendido por quienes lo consideran como una alternativa viable ante el deficiente servicio de transporte urbano con vehículos en mal estado, lugares del municipio donde no se prestaba el servicio y tiempos de espera demasiado largos, entre otros. Pero el argumento principal para quienes lo defienden es que muchas familias del municipio resolvieron el problema del desempleo y ante el crecimiento del mototaxismo se ha abierto espacio a otros negocios como proveedores de motocicletas que ofrecen precios bajos y diversas modalidades de pago para adquirirla, talleres de mantenimiento, ventas de cascos, chalecos etc.
Por lo anterior, reitero, el mototaxismo es una realidad en el Municipio de Maicao y a sabiendas que es una actividad no reglamentada por el Gobierno Nacional, los mandatarios territoriales deben entender que aun cuando la Ley se hace para respetarla, una situación es lo que se vive en las frías oficinas de la capital de la Republica y otra bien distinta la que tienen que enfrentar quienes conviven diariamente con la problemática.
El Gobierno Municipal no debe ser indiferente ante el tema del mototaxismo y particularmente considero que debe tomar medidas conducentes a la sana convivencia ciudadana, comenzando con el control al ingreso de mas motos al municipio mediante la realización de un censo de la cantidad de motos existentes a la fecha, con la identidad de sus propietarios y características de la misma; establecer un convenio entre el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), el gremio de mototaxistas y la Administración Municipal para la expedición de certificados judiciales de la persona que conduce la moto y apoyarse en entidades como el SENA, Policía Nacional y Transito Municipal para la realización de jornadas de capacitación al gremio de mototaxistas, aprovechando los días en que no laboran, tal como el día sin moto y el pico y placa.
Lo anterior con el propósito de promover un comportamiento ordenado y respetuoso que se refleje en la calidad de vida ciudadana y de los mismos mototaxistas, porque se harían acreedores a un cierto grado de tolerancia por parte de sus conciudadanos. Y lo más importante, la vida es el don mas preciado que Dios nos dio y debemos conservarla.
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