domingo, 19 de octubre de 2008

Aisladas 21 comunidades indígenas en la Alta Guajira por fuertes lluvias


Por lo menos 2.000 familias wayuu están damnificadas, según Jaime Espeleta Niño, director del Comité Regional de Prevención y Atención de Desastres (Crepad).

Los aguaceros anegaron por completo las vías terrestres -en esta zona no hay carreteras sino caminos destapados- impidiendo el paso de los camiones que les llevan alimentos desde Venezuela.

Entre los corregimientos que se encuentran aislados por las inundaciones están Puerto Estrella, el Cabo de la Vela, Siapana, la Flor de La Guajira y Nazareth.

El Sistema Nacional de Prevención y Atención de Desastres envió mercados, frazadas, hamacas y medicinas que fueron llevados este fin de semana hasta la Alta Guajira en un helicóptero del Ejército por una comisión encabezada por la alcaldesa de Uribia, Cielo Redondo, el comandante del batallón Gustavo Matamoros D¿costa y un funcionario de Bienestar Familiar.

Un bebé wayuu que nació prematuro el sábado en el hospital de Nazareth fue trasladado ayer por aire hasta Riohacha, donde fue recluido en la Unidad de Cuidados Intensivos de la clínica Cedes.

La alcaldesa Redondo expresó su preocupación por la escasez de alimentos en el norte del municipio como consecuencia de las inundaciones e hizo un llamado al Gobierno Nacional para que construya la vía perimetral que iría desde Uribia hasta Puerto Bolívar. Hasta el momento se han entregado nueve toneladas de alimentos y hoy esperan llevar más ayudas humanitarias por vía aérea o marítima.

Pero las inundaciones no solo se han registrado en la zona rural. El desbordamiento de los arroyos Chemarrain y Cutanamana también tiene damnificadas a 642 familias de los barrios Esfuerzo Wayuu, Fonseca Siosi, San José, el sector del Matadero y Apiamana que tuvieron que ser evacuadas de sus viviendas y reubicadas en albergues temporales dispuestos por la Alcaldía en colegios y en la estación del Cuerpo de Bomberos Voluntarios.

Asimismo, 100 familias de las rancherías Ichirrugo (44) y Petsuapa (56), aledañas a la vía férrea del tren del Cerrejón, fueron reubicadas en un terreno alto mientras disminuye el nivel de las aguas.
"El Tiempo".

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